La Diputación de León responde con un comunicado aclaratorio a la avería en el Telesilla de Riopinos, en el que trata de dar luz sobre los hechos acaecidos.

Tras las informaciones publicadas ayer por La Nueva Crónica de León sobre la avería del telesilla de Riopinos en la estación invernal de San Isidro, de las que nos hicimos también eco en San-isidro.net y en diversos otros medios de comunicación, la Diputación de León ha emitido un comunicado oficial para aclarar los hechos.

Según su versión, el incidente ocurrido el pasado 3 de febrero se debió a un "fallo técnico" que obligó a detener el remonte durante cinco minutos. Posteriormente, se activó un sistema térmico con un motor auxiliar que permitió reanudar el funcionamiento del telesilla a menor velocidad durante unos 20 minutos, hasta completar la evacuación de los esquiadores. La incidencia, según la Diputación, se dio por resuelta a las 15:25 horas.

Desde la institución provincial también se asegura que todos los usuarios fueron informados de la situación en el momento de la avería, desmintiendo algunas críticas vertidas en redes sociales sobre la falta de comunicación.

Sin embargo, más allá de las diferencias en la versión de los hechos, este incidente vuelve a poner sobre la mesa la antigüedad del telesilla de Riopinos y de otras infraestructuras clave en la estación, lo que evidencia la falta de modernización en un complejo que aspira a ser competitivo en el panorama del turismo invernal.

La demanda de nuevas inversiones por usuarios, empresarios de la zona y habitantes demanda las localidades de influencia no se limita a la renovación de los remontes. Es necesario un plan integral que contemple la ampliación de la estación, la mejora de sus infraestructuras y la transformación de su modelo de gestión. El actual modelo de gestión, bajo la responsabilidad de la Diputación de León, es es completamente ineficaz, como se ha demostrado sin ir más lejos tras los retrasos en la contratación de personal para la apertura de esta campaña que obligó a tener sectores cerrados por no poderse atender, o el hecho de encontrarse cerrados aún a fecha de hoy el Hostal Pico Agujas, de su titularidad, y la cafetería de Salencias por haber quedado desierta su licitación.  

Afrontar la necesidad de inversiones de San Isidro podría traducirse en una gestión público-privada que permita dotar a San Isidro de los recursos necesarios para garantizar su seguridad, modernización y competitividad a largo plazo.