Parece mentira que tras el largo verano estemos a tan sólo 15 días de que San Isidro dé el pistoletazo de salida a la temporada 2016/2017. Y eso que a principios de este noviembre ya calentábamos motores con una buena nevada que dejó acumulaciones de hasta un metro de nieve en la estación. Ya lo anunciábamos en aquel momento, los modelos meteorológicos vislumbraban una nueva oleada de frío y nieve entorno al 20 de este mes.

Lo cierto es que, llegados a esta fecha, todos los modelos parecen coincidir en que durante la próxima semana, especialmente a partir del miércoles, sufriremos un buen episodio de nevadas que podría desembocar en importantes cambios meteorológicos más allá del 26 de noviembre.

Días antes recibiremos un frente frío que entrando por el NW dejará algo de nieve ya el viernes día 18, si bien el giro de los vientos a SW en la tarde del sábado provocaría un ligero ascenso de las temperaturas, haciendo aumentar notablemente la cota de nieve el domingo 20.

Sería a partir del lunes cuando las temperaturas vuelvan a caer en picado y se produzcan nuevas nevadas, lo que además posibilitaría que los cañones de nieve ayudasen en la formación de una base sólida que acompañase a la ya existente, aunque deteriorada por las lluvias de días pasados. A mitad de la semana se reforzaría la situación con nuevas y abundantes precipitaciones, que serían en forma de nieve en cotas a partir de entre 1200 a 1400 m. y gracias a la posible formación de bajas presiones sobre el mar cantábrico, la Cordillera Cantábrica podría salir muy beneficiada.

La cantidad final de acumulación de nieve dependerá del lugar exacto donde se originen esas bajas presiones, pero lo que poco a poco va quedando claro a medida que pasan los días es que en mayor o menor medida nevará. Por tanto, a medio plazo las predicciones son bastante buenas si tenemos en cuenta que en esos días estaríamos ya a tan solo una semana de la apertura de la estación.

Si nos vamos más allá, algunos medios especializados vienen hablando de una posible alteración del vórtice polar estratosférico para final de mes. ¿La causa? Una importante anomalía térmica de la región ártica se viene registrando durante este otoño, lo que unido a la gran acumulación de aire frío en la amplia región de Siberia provocarían un cambio de signo que se podría traducir en importantes desalojos de aire polar y ártico en nuestras latitudes.

El noviembre de este año ya se está caracterizando por ser un mes inusual en latitudes más al norte que las nuestras. Tal es así que el pasado día 9 se registraba en Estocolmo la mayor nevada para un mes de noviembre en 111 años de registro meteorológico que ha sorprendiendo a propios y extraños.

Todo parece indicar que la próxima semana San Isidro volverá a cargarse de nieve. Únicamente queda saber si el final del mes y los primeros días de diciembre ponen el broche final para un inicio de temporada épico.