El gobierno del Principado de Asturias quiere evitar que el suministro eléctrico de la estación invernal allerana de Fuentes de Invierno se convierta en un problema eterno. Para ello, y ante la posibilidad, a tenor de los últimos cruces de declaraciones públicas, de que no haya un acuerdo con la Diputación de León para beneficiarse del tendido eléctrico de San Isidro, desde el Gobierno del Principado ya se está trabajando en otras alternativas para llevar la energía eléctrica al complejo y desterrar así los generadores de gasoil que suministran actualmente a Fuentes de Invierno.
El director general de Deportes del Principado, José Ramón Tuero, señaló a este diario que se trabaja sobre varias hipótesis, que no quiso desvelar, aunque dejó claro que en cualquier caso «ninguna va a ser a corto plazo, máxime porque hay que tener en cuenta las dificultades económicas por las que estamos atravesando». El responsable regional de Deportes apuntó que «hay varias posibilidades reales de llevar el suministro eléctrico a Fuentes de Invierno sin falta de tener que pagarle seis millones de euros a León y sin falta de gastar tanto dinero, pero también es cierto que ninguna sería a corto plazo», apuntó.
En todo el caso, el Principado ha tomado la determinación de ir trabajando por su cuenta en una solución al problema energético de Fuentes de Invierno, sobre todo, en el caso de que no se llegue a un acuerdo con la Diputación de León sobre las cantidades a pagar para que Asturias pueda engancharse al tendido de la localidad vecina.
Durante las últimas semanas, el director de Deportes del Principado había indicado que Asturias no iba a pagar la mitad de los 12 millones de euros que cuesta la línea eléctrica de San Isidro, un tendido que a su juicio «León tenía que hacer obligatoriamente, no solo para dar servicio a la estación, sino porque hay localidades y también las urbanizaciones de San Isidro, que precisaban de esa línea». Mientras, desde la provincia vecina, el portavoz del Gobierno, el popular Jaime González, advirtió al Principado de que o paga o no usará la línea eléctrica que está próxima a su conclusión. «Si Asturias desea ejecutar una línea propia que de servicio a su estación desde su territorio, nosotros creemos que está en su perfecto derecho; si considera que con generadores presta un servicio adecuado a los asturianos, está igualmente en su derecho, pero si lo que quiere es utilizar la línea leonesa, sin duda, tendrá que abonar el coste que le corresponda», aseguró el portavoz de la Diputación de León.
Este cruce de declaraciones deja entrever que la posibilidad de llegar a un acuerdo económico a corto plazo entre los Gobiernos de Asturias y León parece lejano, por lo que desde el Principado ya estudian otras alternativas.
Y es que la llegada de la línea eléctrica a Fuentes de Invierno permitiría al complejo allerano impulsar proyectos de mejora que se antojan fundamentales para el desarrollo de la estación en un futuro. En ese paquete de mejoras necesarias en las instalaciones alleranas se encontraría en primer lugar la adquisición de un sistema de innivación artificial que ayudara a paliar la falta de nieve natural. Y es que las condiciones metereológicas adversas de algunos inviernos, como el de la última temporada, se hacen complicados de superar para la estación allerana, mientras que tanto su vecina San Isidro como la otra estación asturiana, Valgrande-Pajares, suplen gracias a los cañones de nieve.
Por otra parte, también está sobre la mesa la unión de Fuentes de Invierno y San Isidro para formar entre ambas el que sería el mayor dominio esquiable de la Cordillera Cantábrica. En este sentido, José Ramón Tuero explicó que ya se han dado pasos en la negociación con la Diputación de León, y que incluso esta misma temporada se podría ya ver un avance de lo que será en un futuro.
Sobre la mesa está la posibilidad de que ambas estaciones puedan ofrecer alguna oferta conjunta para varios días durante la temporada 2012-2013, aunque hasta la fecha no ha habido ningún acuerdo en firme y solamente se ha tratado de conversaciones entre los responsables de ambas administraciones.
Fuente: La Nueva España